Las razones

Ciertos días de la semana
se desacostumbraron a ser
silenciosos y quietos

como un milagro acaecido por piedad

y el milagro trajo los rituales
la fruta el te y tus manos
cuatro ojos con alguna lágrima de paso
las miradas topadoras y apasionadas
las verdades para sordos
el escutinio de la fe
la singularidad de la química
para pocos privilegiados, para todos inexplicable.

Amarme y odiarme en el mismo renglón
en el mismo silencio en el mismo punto de la línea
y por ambas arrancarme la ropa
sé que es insoportable

pero no es justo conjugar
nada de ésto
en pasado

quizás porque
sigan intactas
las razones

para desnudarnos
una y otra vez.

Paraíso

Será así
el paraíso

como tenerte sólo
para mí
sola
todo un día

será como cocinar
pez en el agua
mientras sin ropa y sobre la mesa
besás tu copa de vino
y yo te beso por celotipia
y se nos confunden los
sabores

será como el placer
interminable
el orgasmo ininterrumpido
que no es siempre la explosión
que a veces son los silencios
que me mires transparente
como tus ojos
y llores sin previa advertencia
o rías cantes a mi oído suspires

será como poder  reinventarte
un día después  bajo la ducha
con el agua corriendo
desde los párpados hasta
los pies
como vos con tus
manos ojos labios

Si es así
lo merecemos
por amorodio
por estar acá
todavía
deseándonos
a pesar de todo riesgo
o por ellos.